Viviendo Bajo la Gloria de Dios

Aquellos que no creen es obvio que no verán la gloria de Dios sobre sus vidas.

Pero para aquellos que creen en el Señor y todavía no pueden sentir su presencia TODO EL TIEMPO, esta enseñanza es para eso, para que VIVAMOS SIEMPRE bajo la presencia del Señor.

¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Qué debo hacer?

Muchas preguntas se pasan por nuestra mente cuando nos dicen que la Presencia del Señor estará con nosotros TODO EL TIEMPO, y solamente existe una condición.

Comencemos desde el principio:

La Gloria o presencia de Dios deriva de la palabra hebrea SheKhiná= Gloria o presencia.

La palabra Shekihiná deriva del verbo Shakan; su significado es habitar o morar y eso es exactamente lo que nosotros debemos hacer: morar o habitar todo el tiempo bajo la presencia del Señor.

Un ave habita en su nido, sale a buscar comida para sus hijitos y vuelve pero nunca se aleja demasiado de su nido, porque algún depredador puede atacar sus crías si el no está allí. De la misma manera nosotros.

Fíjese: el Señor es nuestro nido, nosotros somos los pájaros, nuestros hijos son nuestras finanzas, nuestros dones, nuestra familia, nuestros ministerios… ¿Usted como los cuida del depredador?

Puedo imaginarme que lucha por ellos y no los descuida, es por eso que siempre tenemos que habitar y morar en el nido de Cristo Jesús. Mire lo que dice el Salmo 91: 1

EL que habita al abrigo del Altísimo, Morará bajo la sombra del Omnipotente.

O sea: El que habita en el nido del Señor, morara, vivirá, habitara bajo SU SOMBRA, en otras palabras: el que este abrazado al Señor, habitara bajo su sombra, estará bajo Su presencia.

Y Aquí esta la condición: Habitar bajo Su abrigo. Porque no dice el que habite de vez en cuando, cuando el quiera o necesite, o cuando le parezca, porque el Señor no es un Hotel de paso, por eso hay que habitar EN EL SIEMPRE, El es nuestro nido, donde estamos abrigados, calentitos; a temperatura justa, seguros del depredador, que quiere atacar todo el tiempo, robarnos, destruirnos; el nido nos protege de las tormentas, hace que éstas lleguen de una manera diferente a nuestras vidas.

El que quiere que la presencia del Señor esté TODO el tiempo con uno debe habitar bajo el abrigo del Señor SIEMPRE, condición indispensable para que esto pase.

¿Cómo habito siempre bajo el abrigo del Señor?

Fácil: estando en comunión, orando en todo tiempo y a toda hora, recordando a cada segundo que somos hijos del Altísimo, y que como cristianos debe haber sobre nosotros un peso diferente, debemos actuar como Cristo TODO EL DIA, no a veces o cuando voy al culto, sino TODO EL TIEMPO, cuidando de no pecar, y si lo hago pidiendo perdón a tiempo. Se debe notar que el Señor está con nosotros y eso se demuestra a través de nuestros actos y palabras.

Las cosas que puedes lograr estando las 24 hs. bajo la presencia del Señor son asombrosas, el Señor hablará literalmente a tu vida, te mostrará cosas sorprendentes que nunca antes pensaste ver, estará en cada situación de tu vida cotidiana, tu trabajo, tu familia, tu salud, tu estado de animo cambiaran, tus problemas se verán pequeños, porque sentirás que el Señor está contigo y contra El no hay nadie que pueda.

¿Si Dios está contigo quien contra ti?

Que Dios te bendiga hoy y siempre…

Noelia Favier.