La obediencia en medio del temor
Cuenta la biblia la historia de unos gemelos los cuales desde la panza de su mamá competían. Uno era bueno en la caza y hombre de campo y el otro era quieto y pasaba mucho tiempo en su hogar.
Pero después de que el mayor le vendió la primogenitura y luego que el menor le robara la bendición de su padre, estos hermanos se separaron por mucho tiempo.
Al pasar los años, Dios le pide al menor que regrese a su tierra y a su parentela con la promesa de hacerle bien, pero Jacob (el menor) tuvo miedo de regresar por el juramento que Esaú (el mayor) había hecho de matarlo y dudó de ir a verlo; entonces preparó una estrategia obsequiandole muchos animales enviando por delante a sus mujeres, siervas e hijos los cuales anunciarían la llegada de Jacob.
Finalmente cuando los gemelos se encuentran corrieron felices al encuentro y agradecieron a Dios por el encuentro. Lejos quedó el pensamiento de hombre y el miedo a morir, Dios había cumplido una vez más su palabra.
Cuantas veces atemorizados nos paralizamos? Pomemos mayor énfasis en nuestros pensamientos que en la obediencia a Dios.
Creemos que todo saldrá mal cuando Dios nos dice que todo estará bien. ÉL promete sostenemos y hacernos bien. Entonces la obediencia será la clave para avanzar.
Hoy Dios te dice: lo que tenes que hacer HACELO! Porque YO estoy contigo. No te dejaré ni te desampararé seguiré fiel a mi promesa!!!
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