Sueños Rotos...
¿Qué Hacemos con los sueños rotos o aquellos que se desvanecen en nuestras manos o que estando a punto de ser alcanzados simplemente se diluyen?
Es fácil decir ¡No te preocupes! Todo va a estar bien, Dios tiene el control, sólo espera en él.
Pero cuando estamos en ese proceso, cada palabra parece volverse en contra y simplemente no las queremos escuchar.
Pero.... es así! Dios tiene el control, Él sabe porqué, cuando, como y donde. Él sabe si se diluyo tu sueño, no se dio o parecía ser y no fue, o solo si es un tiempo el que deberás esperar...
Hay dos historias de sueños bien marcados en la biblia.
El primer sueño se basa en Sara, la mujer de Abraham; su sueño era ser madre. En aquellos años ser estéril era una deshonra para una mujer. A los 85/86 años de Abraham, Sara le obliga a tener un hijo a Abraham con la criada.
13 años después Abraham conoce a Dios y comienzan las promesas para él y su familia y solo un año más tarde nace Isaac, el hijo de la promesa, por el cual esperaron tantos años.
Cuando Dios habla el cumple, cuando los sueños son de su corazón no hay circunstancias que puedan truncar un propósito o un sueño de Dios, Él cumplirá!
1: Cuando conoces a Dios y te tomas de su mano, Dios cambia, ordena y restituye toda tu vida y los sueños se cumplen, no desesperes...
Otra historia es Noé y el arca. Dios le pide a Noé que construya un arca porque va a destruir todo a causa de la violencia en el hombre (Gn 6.13) y Noé se puso a trabajar, él realmente creía todo lo que Dios le había dicho. 100 años tardó en construir el arca; imagino que si había tanta maldad y tanta violencia en ese tiempo, Noé no se libro de las burlas, las risas y los desprecios de aquellos incrédulos. Imagino que aunque su fe permanecía intacta y creía en Dios, el enemigo y la espera larga en ese sueño lo hicieron titubear, pero siguió firme, CREYENDO y TRABAJANDO en ese sueño que Dios le había trasmitido. Hasta que finalmente sucedió... Llovió y el arca vio el fruto de tanto trabajo.
2-Creer y trabajar por los sueños son las claves para activar esos sueños aunque aún no los veas asomarse.
Podemos elegir dos caminos, el de Sara, manejarnos como queremos y tomar nuestras decisiones sin Dios, llevando luego las consecuencias: hasta el día de Hoy los pueblos que nacieron de Ismael (de quien nace el pueblo árabe o ismaelitas) e Isaac (de quien desciende el pueblo Judío) se odian.
O hacer como Noé, trabajar y seguir trabajando hasta ver el sueño de Dios cumplido.
Nuestra es la decisión.
Noelia Favier.-
http://noeliafavier.blogspot.com.ar/
Es fácil decir ¡No te preocupes! Todo va a estar bien, Dios tiene el control, sólo espera en él.
Pero cuando estamos en ese proceso, cada palabra parece volverse en contra y simplemente no las queremos escuchar.
Pero.... es así! Dios tiene el control, Él sabe porqué, cuando, como y donde. Él sabe si se diluyo tu sueño, no se dio o parecía ser y no fue, o solo si es un tiempo el que deberás esperar...
Hay dos historias de sueños bien marcados en la biblia.
El primer sueño se basa en Sara, la mujer de Abraham; su sueño era ser madre. En aquellos años ser estéril era una deshonra para una mujer. A los 85/86 años de Abraham, Sara le obliga a tener un hijo a Abraham con la criada.
13 años después Abraham conoce a Dios y comienzan las promesas para él y su familia y solo un año más tarde nace Isaac, el hijo de la promesa, por el cual esperaron tantos años.
Cuando Dios habla el cumple, cuando los sueños son de su corazón no hay circunstancias que puedan truncar un propósito o un sueño de Dios, Él cumplirá!
1: Cuando conoces a Dios y te tomas de su mano, Dios cambia, ordena y restituye toda tu vida y los sueños se cumplen, no desesperes...
Otra historia es Noé y el arca. Dios le pide a Noé que construya un arca porque va a destruir todo a causa de la violencia en el hombre (Gn 6.13) y Noé se puso a trabajar, él realmente creía todo lo que Dios le había dicho. 100 años tardó en construir el arca; imagino que si había tanta maldad y tanta violencia en ese tiempo, Noé no se libro de las burlas, las risas y los desprecios de aquellos incrédulos. Imagino que aunque su fe permanecía intacta y creía en Dios, el enemigo y la espera larga en ese sueño lo hicieron titubear, pero siguió firme, CREYENDO y TRABAJANDO en ese sueño que Dios le había trasmitido. Hasta que finalmente sucedió... Llovió y el arca vio el fruto de tanto trabajo.
2-Creer y trabajar por los sueños son las claves para activar esos sueños aunque aún no los veas asomarse.
Podemos elegir dos caminos, el de Sara, manejarnos como queremos y tomar nuestras decisiones sin Dios, llevando luego las consecuencias: hasta el día de Hoy los pueblos que nacieron de Ismael (de quien nace el pueblo árabe o ismaelitas) e Isaac (de quien desciende el pueblo Judío) se odian.
O hacer como Noé, trabajar y seguir trabajando hasta ver el sueño de Dios cumplido.
Nuestra es la decisión.
Noelia Favier.-
http://noeliafavier.blogspot.com.ar/
Comentarios
Publicar un comentario